7 de octubre de 2023

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Perú:

LOS ASALARIADOS TRABAJAN COMO CHINOS

27 de julio de 2005

Anteriormente, cuando la población africana era traslada a estos países en situación de esclavitud, se decía popularmente para nombrar a alguien que trabajaba bastante y sin remuneración, “ese trabaja como negro”. Los tiempos han cambiado, y los términos populares también. Ahora para indicar a alguien que trabaja como esclavo y vive con salarios de hambre se dice, “ése trabaja como chino”. Aquí se hace alusión a los asalariados de la “china socialista”, y de otros países asiáticos donde se aplican salarios de hambre y donde los trabajadores tienen que trabajar duras jornadas como en el siglo XIX.

A propósito de ello, JAVIER NEVES, ministro de Trabajo, propuso un debate sobre la legislación laboral del Perú, “porque se compromete derechos esenciales de los trabajadores. Advirtió que "lo contrario sería totalmente inconveniente porque las protestas y movilizaciones serían enormes" y que de darse dichos cambios podríamos terminar siendo "los chinos de Sudamérica". Y el problema es tremendo cuando el régimen de Toledo pretende reducir los salarios y agrandar la jornada laboral. Entre otras cosas se quiere “disminuir el periodo vacacional de 30 a 15 días, y modificar el pago de gratificaciones por Navidad y Fiestas Patrias. Además hay que recordar, que desde la década del 90 se suprimió la estabilidad laboral y se dictaron una serie de leyes que han facilitado los despidos masivos de trabajadores en cuyo cuadro social hay una precarización general del empleo.

El asunto laboral se torna más grave cuando los asalariados no cuentan con una organización sindical clasista que los defienda. La Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP) en manos del Partido Comunista Peruano (ex pro soviético) y el Partido Comunista del Perú (Patria Roja) está descartada de cualquier manifestación y lucha clasista en favor de los asalariados. Esta central sirve solamente de caja de resonancia de estos dos grupos que desde hace décadas conviven con los gobiernos de turno. Apoyaron al gobierno de Alan García (1985-1990). Hicieron lo mismo con el mafioso Alberto Fujimori (1990-2000) y también apoyaron a Alejandro Toledo. Esta casta burocrática, se acuerda de las movilizaciones obreras solamente cuando se aproximan las elecciones. Usan el movimiento sindical como trampolín para lograr un miserable puesto en el parlamento. Así, durante los últimos 20 años, la CGTP han tenido varios senadores y diputados, mientras que los derechos de los trabajadores se han ido esfumando. Por mencionar algunos ejemplos, Valentín Pacho, secretario de la CGTP fue senador durante la gestión del gobierno aprista. Otro dirigente parlamentario fue Isidoro Gamarra, presidente de esta central. Los dirigentes de la CGTP, después de haber llamado a votar por Toledo, y a pesar de la administración nefasta de éste, no tienen ningún escrúpulo para integrar el mal llamado “Acuerdo Nacional”, que reúne en su seno a los grupos más reaccionarios de la derecha peruana.

En resumen, el drama de los trabajadores peruanos viene por partida doble: El primer responsable son el gobierno de turno y los empresarios que han llevado a una situación de extrema precariedad la vida laboral de los asalariados. El segundo responsable de esta dramática situación, son los dirigentes sindicales y los representantes de los partidos llamados de “izquierda” que amarrados a la teta del Estado y de los gobernantes de turno, hacen prevalecer sus apetitos personales a los intereses económicos y sociales de los trabajadores y del pueblo.