7 de octubre de 2023

INICIO > OTRAS SECCIONES > Especiales

VENEZUELA: CORRUPCIÓN EN SIDOR LA OTRA CARA DE LA REVOLUCION

Edwin Sambrano Vidal.

25 de junio de 2011

SIDOR es una gran empresa. Para quienes no la conozcan es una de las empresas más grandes de América Latina y un de las más completas del mundo. Productora de acero en diversas presentaciones (láminas, lingotes, planchones, palanquillas) y de numerosos subproductos, entre los cuales está la famosa cabilla. Es la Siderúrgica del Orinoco, C.A. con una capacidad instalada de producción de 5 MILLONES DE TONELADAS MÉTRICAS DE ACERO POR AÑO (5MM/TM/año). Un Motor para la industrialización nacional.

SIDOR es uno de los principales motores para el desarrollo industrial independiente y alternativo al petróleo, aún, en estos tiempos del plástico, los polímeros, la industria química y bioquímica, el acero y sus derivados siguen siendo elementos principales para el proceso de industrialización y de construcción de país.

Escándalo de corrupción

Hoy SIDOR se estremece bajo el influjo de una crisis profunda que sacude todas las áreas y que amenaza con entrar en un caos masivamente destructivo. Al lado de una bajísima producción y de un desorden organizacional por la politiquería y la gran ineptitud de muchos de sus altos ejecutivos, se ha destapado una olla de corrupción que parece no tener fin. Hasta ahora, se habla de más de 20 detenidos. Los Directores Ejecutivos de Comercialización, LUIS VELASQUEZ, llamado “el Rey de la cabilla”, y de Finanzas, PEDRO CABRERA resultan implicados en una vorágine de codicia y de fraudes inimaginables que involucra a FERRESIDOR, una empresa creada para suministrar productos siderúrgicos que nunca se encuentran, porque según dicen son desviados, a ORINOCO IRON una productora de briquetas recién nacionalizada, a BRIQVEN, antigua MATESI, entregada al Consorcio Amazonia, filial del conglomerado trasnacional TECHINT cuando se privatizó SIDOR en 1998 y recientemente readquirida por una suma millonaria por el Estado venezolano, a HIERROS SAN FELIX, empresa privada, gran distribuidora y detallista de productos de acero, hierro y otros materiales de construcción, entre otras que seguirán apareciendo.

El centro de estas operaciones de corrupción es la venta a precios irrisorios de productos o subproductos siderúrgicos y otros minerales. También el desvío del precio recibido por estas ventas, el desvío de materiales hacia destinos distintos a los que formalmente se vendían. Es decir, una verdadera maraña fraudulenta, mediante la cual se empobrecía SIDOR, mientras los funcionarios sus cómplices y socios se enriquecían. Es una poderosa y extendida red, un negocio de cientos de millones o de miles de millones de dólares del cual solo hemos visto “la punta del iceberg” y que debe tener unos cuantos peces verdaderamente gordos implicados.

Una historia de corrupción

SIDOR es una verdadera mina a expensas del sudor, el esfuerzo y también el sufrimiento de los trabajadores, quienes son los que producen. El fisco y el presupuesto nacionales son otros pagadores de las trapacerías y los negocios turbios en SIDOR. Antes de 1998, SIDOR fue instrumento para hacer negocios y crear fortunas dentro y fuera del país; se beneficiaron muchas empresas y personas, tanto con su construcción y posterior ampliación, como con su operación y producción. También, SIDOR fue la cantera para la formación de decenas de miles de trabajadores, técnicos y profesionales y se adquirió para el país una tecnología y una capacidad de producción muy valiosa, además se fomentó el nacimiento y crecimiento de una nueva gran ciudad en Venezuela, Ciudad Guayana.

Es después de la privatización en 1998 cuando SIDOR y sus trabajadores comienzan a ser explotados brutalmente. Bajo la administración del CONSORCIO AMAZONIA y con la complicidad de la CVG, SIDOR sirvió para proveer de ganancias fabulosas al conglomerado TECHINT, no solo por la bárbara explotación de los trabajadores, sino, además, por las maniobras mercantiles realizadas con los productos siderúrgicos salidos de SIDOR y vendidos a precios viles a las empresas en México, Argentina o Brasil filiales del conglomerado y luego revendidos por éstas a otros países. Esto es, las mismas operaciones que ahora se están descubriendo ya las realizaron cuando la empresa estaba bajo la co-administración del CONSORCIO AMAZONIA y CVG. Todo esto bajo la mirada complaciente de los funcionarios estatales.

El fraude contra los trabajadores y el fisco

Muchas veces hemos denunciado el fraude contra los trabajadores y el fisco nacional, lamentablemente convalidado por el gobierno. Se trata de más de 565 MILLONES DE DOLARES defraudados a los trabajadores de lo que por la convención colectiva les corresponde por concepto del derecho laboral de participación en las utilidades. Igualmente son sustraídos de las arcas del Fisco Nacional más de 900 MILLONES DE DOLARES, mediante el mismo artificio jurídico-contable (unos contratos de cuentas en participación) utilizado para simular unos falsos gastos financieros presentados en la contabilidad y en las declaraciones de renta de la empresa para ocultar o no declarar beneficios o utilidades líquidas obtenidas en cada ejercicio anual durante los años del 2003 al 2007.

Una vez que los trabajadores demandan, utilizan al organismo tributario del país, el SENIAT, para pretender ocultar el fraude y a los órganos jurisdiccionales, incluido el Tribunal Supremo de Justicia, para crear una apariencia de legalidad en su actuación y negar el justo reclamo de los trabajadores.

La debacle del Sindicato

El control de la Empresa por parte del Gobierno con la “renacionalización” de SIDOR en 2008 no ha significado el reconocimiento de los derechos de los trabajadores. Por lo contrario, la conducta de los nuevos jefes ha sido continuidad de la observada por los tecnócratas de la transnacional, implantando la discriminación política. Partidización e ineptitud al mismo ritmo. El mismo saqueo de la empresa y el desconocimiento de las deudas a los trabajadores acompañado con un macabro plan de destrucción del sindicato SUTISS, gloria de las luchas laborales en Guayana y en el país. Así como la Junta Directiva de SIDOR no se reúne, el Comité Ejecutivo de SUTISS tampoco. Se introduce un clima de violencia enfrentando a los tercerizados contra los trabajadores de la nómina, mientras se impide la asistencia jurídica de los trabajadores y se manipula demagógicamente con algunos beneficios para otorgar preeminencia a algunos directivos sindicales patronales.

Una propuesta de lucha y participación

Son muchas las reservas de la conciencia y la historia de lucha que serán pilar para la reconstrucción del movimiento obrero siderúrgico. En medio de este cuadro dantesco se impone una línea de trabajo que rescate al sindicato para colocarlo al servicio de la defensa de los derechos de los trabajadores y que apoye el proceso de reactivación de la capacidad productiva de la empresa para ponerla al servicio del país y que se establezcan estructuras estables de participación democrática de los trabajadores en la dirección de la Empresa, desterrando la corrupción, el abuso, la mentira y la ineptitud.